Indigo II: De tintas y colores

"Gente de carne y hueso.
Gente de metal.
Oro, plata, bronce, estaño.
Gente horrible y fatal"

Yo soy de papel.
De papel cuadriculado.
Casi transparente.
Aun sin ser amado.

¿Quien quiere un papel transparente, 
si muestra más de lo que se ha impreso en él?
Y es que ni siquiera pasa por tu mente
que estoy haciendo fila para ser tu hoja fiel.

Hay tinta azul en mis fibras.
Has escrito sobre mi.
Has querido mostrarme a tu chica.

Yo cuento mis cifras, 
para hacerte feliz.
Y esto me duele y me pica.

Y me has entregado a sus femeninas manos. 
Me has regalado a ella.
De ti para ella.

Aunque soy transparente, no ha comprendido nuestro salpicado de colores, 
y todo el sancocho de amores. 

Porque soy transparente, muestro el rojo vivo de la chimenea detrás mío, 
y tu le has dibujado flores.

Así soy yo desde que te conocí,
porque soy transparente.
Muestro más de lo que has escrito en mi,
porque soy transparente

Este rojo no es tuyo, es mío.
Lo he dejado atravesar mi transparencia.
Indago, intuyo y me río.
Y muero sin advertencia.

Soy ilegible.

Tu tinta azul se ha confundido con mi rojo,
porque muestro colores que no has pintado sobre mí.

Todo lo confundo y pongo en remojo,
lo que siempre he querido que pienses de mí.

¡Perdóname! ¡Soy una simple hoja transparente! ¡Todo color lo mezclo!

No he querido confundir lo nuestro.
¡Gran malentendido de tintas y colores, esto!